Santiago, una ciudad con altos índices de accidentes: UN LLAMADO A LA CONDUCCIÓN RESPONSABLE Y A LA EMPATÍA
En el dinámico escenario del transporte público urbano, la seguridad siempre ha sido una prioridad crucial para Metbus. Sin embargo, en los últimos años, la incidencia de accidentes ha mostrado preocupantes tendencias que requieren una acción inmediata y efectiva por parte de todos los involucrados. En especial, los conductores de los vehículos de transporte público enfrentan desafíos significativos que afectan no solo su propia seguridad, sino también la de los pasajeros, automovilistas, ciclistas y peatones.
Humberto Franchini, gerente de operaciones de Metbus, en base a estadísticas y análisis en conjunto con las autoridades, sostiene que el refuerzo de las medidas es algo que debe ser un compromiso, no solo de operación eficiente, sino también de responsabilidad moral y ciudadana.
¿Cuáles son los escenarios más críticos para la seguridad vial en este momento?
Uno de los principales escenarios donde se registran accidentes graves es en los virajes a la derecha, cuando el semáforo está en verde tanto para los peatones como para los vehículos al mismo tiempo. Esta situación, aunque reglamentaria, exige una precaución extrema por parte de los conductores. Los atropellos a peatones que cruzan legalmente son demasiado frecuentes y devastadores. Es esencial que nuestros conductores profesionales estén plenamente conscientes de esta situación y actúen con la debida cautela, priorizando la vida y la integridad de quienes comparten las vías con ellos.
¿Cómo afecta el uso de celulares y cómo prevenir accidentes por distracción?
Ese es otro factor crítico que contribuye a la accidentalidad: el manejo descuidado debido al uso de dispositivos móviles. La distracción causada por el uso de celulares mientras se conduce es una causa directa de numerosos accidentes. Los conductores deben tomar consciencia que cualquier distracción, por mínima que parezca, puede tener consecuencias dramáticas. Es imperativo que eviten el uso de celulares mientras están al volante, salvaguardando así vidas, incluidas las suyas, para evitar tragedias.
¿Cuál es el diagnóstico de Metbus respecto al uso de dispositivos móviles por parte de los conductores?
Un estudio de comportamiento realizado por el equipo de Prevención de Riesgos de Metbus arrojó la preocupante cifra de que el 31% de los conductores fiscalizados conducían manipulando un teléfono o relojes inteligentes, aumentando el riesgo de protagonizar accidentes viales que muchas veces pueden costar la vida de personas inocentes. Como servidores que movilizan una ciudad y que son cada vez más valorados, nuestros conductores deben procurar ejercer su labor con responsabilidad hacia los usuarios y las familias que hay detrás de cada conductor.
¿Qué otros factores de riesgo de accidentes han identificado?
Los excesos de velocidad y el incumplimiento a las normas en los pasos preferentes de peatones son prácticas igualmente peligrosas que deben ser eliminadas de las acciones habituales de los conductores de Metbus. La velocidad inadecuada reduce significativamente el tiempo de reacción de los conductores y aumenta drásticamente la gravedad de cualquier colisión o atropello. Del mismo modo, el respeto a los pasos peatonales no solo es una cuestión de normativa legal, sino también de sentido común y humanidad hacia quienes caminan por las calles.
¿Cuáles son las medidas básicas de seguridad que los conductores deben seguir para evitar accidentes graves?
Es obligatorio siempre el uso de cinturón de seguridad al manejar, estar atento a las condiciones del tránsito y, al bajar del bus, asegurarse de que el freno maxi esté activado. Estas simples acciones pueden ser la diferencia de protagonizar un grave accidente o llegar a su casa sin novedad al final de cada jornada.
Un compromiso con la seguridad vial
“En vista de estos desafíos, es crucial que los conductores redoblen sus esfuerzos en materia de seguridad vial, la formación continua en técnicas de conducción defensiva y la concientización sobre los riesgos específicos mencionados deben ser prioridades permanentes.
La reducción de la accidentalidad en el transporte público no es solo una meta alcanzable, sino una responsabilidad moral y legal que todos debemos asumir. Al mejorar las conductas de manejo, especialmente en situaciones críticas como virajes con luz verde preferencial, manejo distraído por celulares, excesos de velocidad y respeto a pasos peatonales, estamos protegiendo vidas y contribuyendo al bienestar de nuestras comunidades.
La seguridad vial no debe ser menospreciada, es un compromiso que debe ser reafirmado cada día, en cada viaje y aún más en condiciones desfavorables como los días de lluvia”.
Humberto Franchini, gerente de Operaciones.